Collalba gris (Oenanthe oenanthe)
A lo largo del mes de septiembre tiene lugar el paso de paseriformes migrantes transaharianos, aves diminutas como la collalba gris, la tarabilla norteña o el bisbita campestre, capaces de atravesar el árido desiertos ayudadas con sus diminutas alas. Este año me pidió que le acompañara a realizar el censo José Luis Pérez Chiscano. Este maestro de ornitólogos lleva años repitiendo el mismo transecto todos los fines de semana entre septiembre y la primera quincena de octubre. El lugar elegido está en la comarca de la Serena, un camino solitario y elevado entre Castuera y La Guarda; las primeras horas de la mañana son estupendas para ver el movimiento de las aves. Cernícalos, papamoscas, tarabillas… la semana pasada nos sorprendió un alcotán, estaba posado en un poste despejado, en mitad de la llanura desarbolada, como rompiendo los esquemas que tenemos todos de cual sería el lugar casi imposible de encontrarlo (si no fuera por la migración).
De las transaharianas, la especie más frecuente es la collalba gris, elegante en su forma de posarse, erguída, con sacudidas de su cuerpo para mostrarnos su cola con la “T” negra invertida sobre fondo blanco. Me resulta increíble como esta ave casi desértica ha conquistado el hemisferio norte, adelantándose a las demás especies de su género. Espero José Luis, que continuemos muchos años haciendo el transecto, todavía tienes mucho que enseñarme.
Es alucinante cómo después de tantos años de observación, D. José Luís ha llegado a conocer a la perfección la migración de las collalbas y en especial la secuencia de paso de las diferente especies y subespecies. Hace más de 20 años, cuando yo andaba aún por Villanueva, ya estaba haciendo estos transectos! Aprovecha cada salida al campo con él al máximo, es el mejor profesor que puedes tener y el mejor ejemplo en todos los sentidos. Muy chulas las fotos! Este año ni he salido de collalbas...a ver si el próximo tengo más suerte. Un abrazo!
ResponderEliminarBonitas fotos JuanPa, y la vivencia de andar con un maestro de esa talla no tiene precio.
ResponderEliminarUn abrazo.
Menuda envidia Juan Pablo. Es increible la afición de D. José Luis. Un saludo.
ResponderEliminarbonita estampa la primera con la collalba sobre el poste, con esa luz,
ResponderEliminarun saludo
Juanpa aprovecho el blog para agradecerte tus enseñanzas.
ResponderEliminarA ver cuando tenemos ocasión de poder salir otra vez al campo a observar imágenes tan bellas como éstas.
Preciosas las fotografías.
Abrazotes campeón.
Juan